voces desiertas

Letras de la Casa de la Poesía - Buenos Aires


Publicado el 9 de Marzo, 2008, 20:46

   "En la tragedia griega, la 'hybris' o desmesura, es un rasgo del héroe clásico que precipita el desenlace. Para un lector/ espectador no especializado en el drama antiguo, ese será un momento de Pasión desenfrenada. Para ingresar en el poemario de Alicia Genovese (Lomas de Zamora, 1953), es necesario conocer la aproximada definición del término que da el Diccionario de Mitología de Grimal: 'Hibris es una abstracción, la personificación del Exceso y la Insolencia'. Puras figuras de la ficción. (...) De variada estirpe, algunos de estos poemas recuerdan a las Locas mujeres de Gabriela Mistral. La personal voz de Alicia Genovese y más de una veintena de poemas, hacen de La Hybris uno de los libros más sólidos de la poesía actual argentina" (Juan Fernando García, Suplemento Ñ del 16/02/08).                    

                                                       Mover las sombras es lo que se hace
                                                      cuando no es posible discernir lo que
                                                      está pensando el adversario

                                                                             MIYAMOTO MUSASHI

"Fingir un ataque poderoso
para conocer en las reacciones
la intención del otro;
es lo que un maestro oriental llama 
mover las sombras.

Pero no hubo respuestas;
los ejércitos no se desplegaron
en escuadra,
los barcos no izaron sus velas
en el viento de la furia,
ni partieron columnas de avanzada,
con sus petos inclinados
y su andar sigiloso.
Ningún guerrero solitario
saltó por detrás de la espesura
con una verdad afilada
como un sable legado por ancestros.

Nada que pudiera encontrarse
en el arte de la guerra;
apenas una contenida alteración
y unas palabras suaves
en el camino de los ojos;
sólo la palidez de quien intenta
relajar su movilidad;
una fineza experimentada
en el combate, que distingue
la clase de golpes,
por el pulso del corazón.

Un peligro mayor
deshacía su estrategia
y la del maestro oriental;
le descomprimía los músculos
y la invadía
con una inequívoca exudación;
estaba siendo amada,
más aún, debía aceptarlo."

Alicia Genovese, La hybris, bajo la luna, Bs. As., 2007.

Publicado el 5 de Diciembre, 2007, 23:30

   Una letra familiar es la primera nouvelle de Irene Gruss, poeta y escritora argentina nacida en Buenos Aires en 1950. Esta nouvelle está organizada como un diario íntimo, escrito por una niña que está dejando de serlo, con todo lo que eso siginifca: la confrontación con las diferencias familiares, la caída abrupta de la imagen de los padres "ideales", el amor y la admiración por su padre, la relación con sus hermanos y la locura, el encuentro y desencuentro del amor, los días en la escuela, los primeros bailes, los cambios, las pérdidas, la añoranza. El libro se encuentra escrito con el tono, con la voz vertiginosa de esa niña en sus primeros años de adolescencia, pequeños fragmentos que van hilvanando su vida, sus recuerdos inmediatos, el registro del día a día, su deseo de ser escritora, o de cantar, en definitiva, de sobrevivir.   

"VOY A ANOTAR esto:

Eso era yo cuando era chica: subida al médano más alejado y más alto, para ver lo que quería: el sol que bajaba casi encima de mi cabeza, y el mar que saludaba como dándome la bienvenida, o al revés, como si se despidiera. Yo jugaba distinto: ahí arriba era igual a la naturaleza, una cosa mínima como las cosas, no una persona. Una se hacía amiga de la pena que daba caerse el sol, la que daba el volver a la casa, el griterío de antes de la cena, escuchar por última vez a los árboles contándose vaya a saber qué historias, qué viento último los tomaba con la palma de la mano. (...) Como la vez que me miré en el espejo del baño de la Bobe y me vi los ojos. Estaban distintos, antes tenían una especie de velo brillante, y ahora no, de repente ya no. Bajé la cabeza, porque me estaba peinando, la incliné a un costado y me miré otra vez. Ahí me di cuenta de que ya no era más chica, por los ojos. Me puse las hebillas y entré en el comedor como si nada. Mi hermano me dijo:<Por qué te pusiste el pelo así?>. Y yo no le di bolilla y me fui a sentar al otro lado de la mesa, justo enfrente de mi padre".

Una letra familiar, Irene Gruss, Ed. bajo la luna, agosto 2007, Pg. 52

Publicado el 14 de Septiembre, 2007, 12:17

  Alicia Genovese nació en Lomas de Zamora (Pcia. de Bs. As.), en 1953. Es Doctora en Literatura Latinoamericana por la Universidad de Florida (USA). Actualmente es profesora y dirige el Departamento de Literatura de la Universidad Kennedy. En 1999 obtuvo la Beca a la Creación del Fondo Nacional de las Artes y en el 2002 recibió la Beca Guggenheim, con el proyecto de su libro Química Diurna, del cual extraigo este bellísimo poema. Alicia coordina talleres literarios y supervisa proyectos individuales de escritura desde hace diez años. Entre abril y julio de este año, coordinó el Taller de la Casa de la Poesía al que tuve la gran suerte de asistir. En Rosario, podremos escucharla en el Centro Cultural Bernardino Rivadavia, en dos oportunidades: el martes 25 de septiembre  las 19:30 hs, participará de un homenaje a la poeta Alejandra Pizarnik, y el jueves 4 de octubre a las 21:00 hs, leerá sus poemas en el XV Festival Internacional de Poesía.

ECLIPSE

"Podría seguir escribiendo
en este paisaje
aunque hubiese desaparecido
podría llevarlo
como un puñado de tierra
húmeda en un frasquito
o cuentas de semillas
en una bolsita, para convocar
pequeñas escenas
en su fuera del tiempo:

Un eclipse de luna,
por ejemplo,
desde la bajante del río;
lo mirábamos
entre chicos semidormidos
cerveza tibia y perros
desconcertados a esa hora
en el muelle;

una luna oscura
abrazada por un hilo de fuego
rodeada por un aro incandescente;
lo que fue devorado
y lo que sigue indeleble,
por un moento grabados
en una única imagen
una única captación
Hasta que la noche se deshizo
poco a poco
y la luna brilló
más enorme aún
entre las cañas

De regreso a la casa
el camino
se volvía un claro
y un viento suave
sacudió la pantalla
metálica de la lámpara,
reiterando el movimiento
Otra vez todo fue presente,
inidicio de riesgo y porvenir

No es sólo melancolía
detener
cada detalle, como en un diario,
impedir que se pierda
en la distracción de lo abierto,
es rehacer
volver a recibir
la seducción del mundo
y dónde y cómo
nunca el porqué"

Alicia Genovese, Química Diurna, Alción Editora, Córdoba, 2004.