Publicado el 27 de Agosto, 2008, 17:10
Rainer Maria Rilke, Cartas a un joven poeta (fragmento de la carta VIII), Losada, septiembre 2004. Imagen: Hokusai, Niño sobre el monte Fuji (1839) |
Publicado el 28 de Marzo, 2008, 21:40
"Las obras de Kawabata unen la delicadeza con el vigor, la elegancia con la conciencia de lo más bajo de la naturaleza humana; su claridad encierra una insondable tristeza. Son modernas aunque directamente inspiradas en la filosofía solitaria de los monjes del Japón Medieval. La manera en que el escritor elige sus palabras, demuestra qué sutileza, qué grado de estremecedora sensibilidad puede alcanzar la lengua japonesa; su estilo único, con una agilidad infalible, es capaz de ir directo la corazón de un hombre para expresar su sustancia -ya se trate de la inocencia de una jovencita o de la horrorosa misantropía del anciano-. Una concisión extrema -la concisión cargada de sentido de los simbolistas- se instala en obras cortas que, a pesar de su brevedad, engloban todos los aspectos de la naturaleza humana. Para muchos escritores del Japón moderno, los imperativos de la tradición y el deseo de crear una nueva literatura se mostraron casi inconciliables. El señor Kawabata, sin embargo, con su intuición de poeta, ha superado esta contradicción para convertirla en una síntesis. En todos sus escritos, desde su juventud hasta nuestros días, se encuentra, como una obsesión, el mismo tema: el contraste entre la soledad fundamental del hombre y la inalterable belleza que se aprehende intermitentemente en las fulguraciones del amor, como un rayo que de pronto pudiera revelar, en el corazón de la noche, las ramas de un árbol en plena floración. Es un honor para mí recomendar a quien, más que nigún otro escritor japonés, presenta verdaderamente las cualidades requeridas para el Premio Nobel de Literatura". Yukio Mishima En Yasunari Kawabata/ Yukio Mishima - Correspondencia (1945-1970), Trad.: Liliana Ponce, Emecé Editores, abril 2003. |