voces desiertas

Diarios


Publicado el 23 de Marzo, 2009, 23:49


1984

20 de enero
"Canasancio, languidez, fragilidad. Como cuando las pilas se agotan y la linterna sólo parpadea".

22 de julio
"El escritor como personaje social es un personaje un tanto confuso, como el santo o el chamán... Sin duda hay gente que expresa sus ideas por escrito, pero el término <escritor>, a diferencia de <dentista> o <mecánico>, no define la actividad de un individuo. Todos los que son escritores en un sentido social me parecen sospechosos."

16 de agosto
"Trópico. Camino mareado. Me gusta vagar por el piso medio mareado. Así fue la vida en algún momento".

1985

11 de enero
"Me llama un perdiodista de Nueva York que se ofrece a venir a visitarme, pero respeta mis reservas: como sabe que no me prodigo con los medios, sólo pretende hacer una <entrevista póstuma>, cuya publicación se retrasará hasta que yo haya pasado a mejor vida. La oferta es cortés y discreta. En cualquier caso, el optimismo del periodista me sorprende, sobre todo su seguridad en eso que ha dado en llamar <entrevista póstuma> y en que me sobrevivirá a mí, al anciano. Aunque esa certidumbre está refrendada por los datos que proporcionan las estadísticas, en la práctica no es tan seguro que el entrevistador, que tiene veinte años menos, sobreviva al anciano de ochenta y cinco años. Tal vez ocurra que sea yo quien escriba su necrológica. No es que lo considere probable, pero ¿quién puede descartarlo?".

28 de enero
"Ya no tenemos futuro, la vida está completa, sólo aspiro a poder irme tranquilamente. Cada día se añaden síntomas del desgaste físico y mental. A veces me siento como un recuerdo de mí mismo".

17 de octubre
"No escribo ni leo, pero a veces sueño que sí lo hago, y las líneas se van sucediendo como los subtítulos de una película. Las frases tienen sentido, la selección de palabras es correcta; la redacción, ingeniosa. No soy yo quien escribe, sino que mas bien se trata de un proceso que ocurre en mí. El camino que conduce de la vida a la muerte es oscuro, voy trastabillando de la nada a la nada, y en ocasiones sucede que, en el trayecto, una palabra o un concepto resplandece como las luciérnagas en un bosque oscuro."

Sándor Márai (Kassa, Hungría 1900 - San Diego, USA, 1989), Diarios 1984 - 1989, Salamandra, Barcelona, noviembre 2008.
Por piaramburu, en: Diarios

Publicado el 29 de Diciembre, 2008, 17:50

  1919 - "Poder sentarse frente a la pequeña chimenea de leña con las manos cruzadas en el regazo y los ojos cerrados; imaginar que vuelves a ver sobre los párpados toda la belleza danzante del día; sentir la llama en la garganta como solía imaginar que sentía la mancha de amarillo cuando Bogey me colocaba las flores amarillas bajo la barbilla... cuando respirar es tal placer que da casi miedo hacerlo; como si una mariposa moviera las alas sobre tu pecho. Saborear aún la cálida luz del sol que se derrite en la boca, poder oler el aroma blanco y de cera esparcido sobre los campos de junquillo y el salvaje y fuerte del romero que crece en pequeños manojos entre las rocas rojas junto a la orilla del mar... Está saliendo la luna pero el día, reacio a concluir, se prolonga en el mar y en el cielo. El mar está salpicado del rosa de las cerezas poco maduras y en el cielo se ve una luz amarilla volando como las alas del canario. Los troncos de las palmeras son muy tenaces y sólidos. Las hojas verdes y rígidas que brotan  de sus copas perecen cortar el aire del atardecer, y entre ellas, los eucaliptos azules, altos y esbeltos, con hojas en forma de hoz y ramas colgando, mitad azul, mitad violeta. La luna está justo sobre la montaña detrás de la aldea. Los perros lo saben; ya empiezan a aullar y a ladrar. Los pescadores se gritan y se silban mientras guardan las barcas, algunos chicos cantan en la orilla con voces medio rotas y se oye el ruido de niños llorando, niños pequeños de mejillas quemadas y arena entre los dedos de los pies a los que se está llevando a dormir...

Estoy cansada, felizmente cansada. ¿Crees que las margaritas se sienten felizmente cansadas cuando se cierran por la noche y el rocío desciende sobre ellas?"  

Katherine Mansfield, Diario, Ed. Lumen, Barcelona, abril 2008.

Ultimo post del año. Que tengamos un 2009 lleno de cosas buenas, tranquilo, generoso (gracias anita por tus buenos deseos!) y en el que nos sea posible concretar lo que deseamos. Que sea un buen año. Para todos. 

Por piaramburu, en: Diarios